¿Qué hacer para que florezcan los geranios?
Si eres de los que ama tener un jardín lleno de color y vida, seguramente te encantan los geranios. Estas flores son muy populares por su belleza y resistencia, pero a veces pueden ser un poco difíciles de cuidar. Si te estás preguntando cómo hacer para que tus geranios florezcan como nunca, ¡has llegado al lugar correcto! En este artículo te daremos algunos consejos prácticos y sencillos para mantener tus geranios saludables y llenos de flores. ¡Continúa leyendo!
¿Cuál es el mejor abono casero para los geranios?
Los geranios son plantas que requieren de cuidados específicos para florecer adecuadamente. Una de las preguntas más comunes que se hacen los jardineros es: ¿Cuál es el mejor abono casero para los geranios? Aquí te compartimos algunas opciones:
- Cáscaras de huevo: Las cáscaras de huevo son una excelente fuente de calcio para las plantas. Lava bien las cáscaras y tritúralas en pedazos pequeños. Luego, esparce los pedazos sobre la tierra de tus geranios.
- Posos de café: Los posos de café son una buena fuente de nitrógeno. Mezcla los posos con la tierra de tus geranios o esparce los posos en la superficie de la tierra.
- Cáscara de plátano: Las cáscaras de plátano contienen potasio, fósforo y calcio, lo que ayuda a que las plantas florezcan. Entierra una cáscara de plátano en la tierra de tus geranios.
Recuerda que, aunque estos abonos caseros pueden ser muy beneficiosos para tus geranios, es importante no abusar de ellos. Utilízalos con moderación y complementa con abonos comerciales si es necesario.
Las cáscaras de huevo, posos de café y cáscaras de plátano son opciones económicas y eficaces para mantener tus geranios saludables y florecientes.
¿Qué abono se le echa a los geranios?
Los geranios son plantas muy comunes en nuestros jardines y terrazas por su gran belleza y fácil cuidado. Para que florezcan en todo su esplendor, es necesario proporcionarles los nutrientes necesarios a través de un buen abono. Pero, ¿qué abono es el más adecuado para los geranios?
Lo ideal es utilizar un abono orgánico, ya que aporta los nutrientes necesarios para el desarrollo de la planta de manera natural. El compost es una excelente opción, ya que contiene una gran cantidad de nutrientes y además ayuda a retener la humedad en el suelo.
Si no disponemos de compost, podemos utilizar abonos comerciales específicos para geranios. Es importante leer bien las indicaciones del fabricante, ya que cada abono tiene una composición diferente y debemos asegurarnos de que contiene los nutrientes necesarios para el crecimiento y floración de nuestros geranios.
Es recomendable abonar los geranios una vez al mes durante la primavera y el verano, que es cuando se encuentran en pleno crecimiento y floración. Durante el otoño e invierno, es suficiente con abonarlos cada dos o tres meses.
Recuerda que el abonado debe realizarse siempre después de regar la planta, nunca al contrario, ya que podría quemar las raíces de la planta.
Espero que estos truquillos os ayuden a tener unos geranios que sean la envidia del vecindario. Dale caña al riego, abono y poda, y verás como se ponen que flipas. ¡Un abrazo y a disfrutar de la jardinería!
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